Seis meses desde el fin de mi embarazo, seis meses desde que Iván se asomó al mundo, seis meses de placentera y exitosa lactancia, y sobre todo seis meses de felicidad absoluta.
Parece mentira lo rápido que pasa el tiempo porque hace nada que estaba embarazada, y ya mi niño come con cuchara. Casi no recuerdo cuando era recién nacido, cuando era un ser delicado al que había que coger con suavidad, sostener su cabecita, cuando me sobraban brazos para cogerlo.
Han sido seis meses maravillosos, de continuio aprendizaje, de nuevos descubrimientos, de sorpresa, de alegría, de placer por ver crecer a lo que yo mismo creé en mi vientre.
Estoy muy contenta por celebrar seis meses de vida de mi hijo, y a la vez triste porque siento que ha pasado muy rápido y casi no he tenido tiempo de enterarme.
Pero bueno, lo importante es que tengo a mi hijo conmigo, que me hace feliz, que ha cambiado mi vida por completo haciendo que todo valga la pena por él.
la verdad es que si que pasa rápido el tiempo.. y aunq ahora te de un poco de pena dejar a tu “bebe” para empezar a tener un “niño” verás lo emocionante que es y lo mucho que aun te queda por disfrutar..
Hola guap!!! Ivan esta preciosooooooooo.
YO tengo la misma sensacion q tu hija…seme ha pasado el tiempo volando!!! A veces me gustaria tenerlo un dia de recien nacido otra ves…joer ya mismo tienen el año tia yhablan y to!! pero bueno somos felices con verles creceer!!! un beso enorme wapisimaa
bueno, ale, cada edad tiene sus cosas bonitas. la verdad es que pasa el tiempo rapidísimo y cuando te das cuenta te están pidiendo más y más horas para salir, jajajajaja.. pero mira, disfruta de tu peque cada día. ahora tiene sus cositas, sabe hacer más cosas, sonríe sabiendo qeu lo hacel… también eso es bonito.
y feliz medio año!!!
¡¡Felices 6 mesazos Iván!!
Pasa el tiempo taaaan rápido que por más que quiere una disfrutar (y lo haces) es imposible…Yo no trabajo, pero me pasa igual, que el tiempo vuela y que no puedo hacer nada para detenerlo y disfrutar de estos momentos de mi pequeño.
si es que está guapísimo!!
no te de pena que vaya creciendo y pasando el tiempo, cada etapa te va a brindar cositas y experiencias nuevas y vas a disfrutar de todas!
Besitos guapa.
Felices 6 meses precioco….
Muchas felicidades, se ve guapísimo, seguro que romperá muchos corazones en un futuro no muy lejano eh!
Un abrazo desde México.
El tiempo vuela!!! No somos conscientes de lo rápido que pasa y se nos va de entre las manos…
Cada etapa tiene su propio aprendizaje, porque cuando nacen, no nos dan el ‘manual de instrucciones’. Cuando crecen y se hacen mayores y se independizan, la única ‘protección’ que podemos ofrecerles es una oración para que el Universo entero les proteja. Se van de nuestro lado, emprenden sus propias vidas y sólo podemos ser meros espectadores, respetarles la individualidad y esperar que hayamos hecho medianamente bien el trabajo, suficiente como para que ellos puedan afrontar las contingencias de la vida con valor, con serenidad, con entereza, con dignidad, con humildad y sobre todo, con paciencia.
Yo soy abuela varios nietos, algunos de ellos de 30 años. Y hoy he visto por vez primera tu blog, y he disfrutado mucho leyéndote y observando cómo has vivido tu maternidad. Te felicito por esa sensibilidad al explicarte en cada momento de tu gestación hasta el instante de dar a luz a tu niño. En mi época no existían estas ‘modernidades’ ni estos medios tecnológicos, pero si existían unos bellos diarios forrados en fino cuero y con sus páginas fileteadas en oro, la estilográfica y muchas horas para laborar, leer y escribir, porque la ‘tele’ tampoco era ‘la dueña de casa’ ni nos ‘devoraba’ las entrañas del tiempo necesario para vivir; en mi época, existían los estudios fotográficos en blanco y negro, o las fotos ‘coloreadas’ (tengo 84 años). Como puedes imaginar, tengo un diario por cada uno de mis hijos (tengo 6 en total, 5 varones y una chica). Guardo fotos de todos mis hijos (por entonces, se estilaba hacerlas cuando los bebés habían cumplido los 40 dias, porque la mortalidad infantil era alta y ninguna madre quería fotos demasiado ‘tempranas’ por miedo a que fuesen un ‘recuerdo triste’). Los tiempos han cambiado mucho desde entonces.
En mi época, los hijos eran bendiciones del cielo, porque eran la mayor riqueza a la que podiamos aspirar. Es raro encontrar a una joven como tú que valore tanto la maternidad, porque ‘dar vida’ es la mayor satisfacción de cualquier mujer que se sienta mujer. La maternidad es una verdadera bendición por las muchas recompensas que recibimos a cambio de unos pocos inconvenientes. Las mujeres de mi generación sabíamos que ‘ser madre’ no era cosa ‘baladí’, ni una forma de ‘darnos publicidad’ estilo Hollywood. Éramos madres ‘a tiempo completo’, ejercíamos la autoridad necesaria para mantener el orden, el respeto y el amor familiar. Vivíamos horarios a ‘rajatabla’, y nadie rechistaba; los hermanos menores ‘heredaban’ ropas, zapatos, libros y juguetes, de los hermanos mayores, y las madres que teníamos inquietudes intelectuales, procurábamos que esas ‘herencias’ tuviesen una ‘carga especial de devoción’ que los más pequeños valoraban y apreciaban. A los mayores se les exigía el cuidado de todo lo que se les proveía y no podían desgastarlo desconsideramente, porque sabían que la estrechez económica les hacía responsables de ser ‘guardianes’ en cierta medida del ‘bienestar’ de los más pequeños, y a estos últimos se les transmitía la idea de la ‘gratitud’ por el ‘regalo cuidado’ de sus hermanos y se les pedía que respetaran escrupulosamente los objetos de los mayores hasta que algún día pasara a ser de ellos.
No existían los celos, las riñas ni la avaricia. Existían el respeto, el amor y la gratitud de los menores hacia los mayores y el sentido de responsabilidad, el cuidado y el amor de estos por los menores.
En fin, me cuesta mucho aceptar la sociedad actual, donde todos esos valores se han ido esfumando y han ido dando paso a un materialismo puro y duro, a un hedonismo salvaje y a una indolencia real disfrazada, eso sí, de una semántica ‘políticamente correcta’ que no se ajusta al grueso de una sociedad que prefiere abortar, no respeta a la gente de mi edad (y nos quieren ‘eutanasiar’ a base de leyes) y le ‘respetan los derechos’ a los delincuentes, mientras la gente de a pie se ve impotente para defenderse del vandalismo, el terrorismo y la delincuencia.
Espero que tengas la inmensa dicha de ver a tu hijo convertirse en un hombre de bien y que todos tus desvelos se vean recompensados con el legítimo orgullo de una madre que ha podido expresar con sensibilidad y amor todos los sentimientos que tu hijo ha despertado en ti.
FELICIDADES!!!