Un poco de nostalgia

Una de las cosas que más me alegra de este blog es la facilidad que me brinda para echar la vista atrás y recordar muchos momentos.
Con frecuencia dejo el portátil con el blog abierto,  mientras hago cualquier otra cosa insustancial (cuando puedo, claro); y de repente me veo pinchado en alguna de las entradas que propone LinkWhithin y releo mis últimas semanas de embarazo de Antía, los inicios de la lactancia de Iván, cuando supe el sexo de mis niños, sus primeros movimientos fetales…
Y entonces revivo como si fuera ahora cada uno de esos momentos y me entra muchísima nostalgia; mis embarazos han sido la etapa más especial de mi vida, es tanto lo que se vive, tan increíbles las sensaciones y tan especial esa conexión mamá-bebé que hasta lo hecho de menos. A ratitos, pero sí, lo hecho de menos, y pienso que si pudiera pagaría por volver a vivir aunque fuera solo durante unos minutos el placer de sentir los movimientos de un bebé en mi barriga.
Hoy estoy muy nostálgica. Será que no ando muy fina últimamente, que la Navidad nos pone sensiblones, o que de repente veo cómo el tiempo pasa irremisiblemente y mis bebés se me escapan de las manos. Bebé, ya casi no puedo llamar así a mi niña cuando la veo, casi no queda nada de aquel ser indefenso, dependiente y delicado. Bueno sí, nos queda la lactancia materna, en esos breves minutos de conexión mutua parece que se retrotrae y por un momento vuelve a ser el bebé que era, aunque dura ya bien poco.
Tengo mucha nostalgia de todo ese pasado. Sí, se que queda mucho por delante y disfruto cada día de mis hijos, de sus aprendizajes, sus anécdotas, sus gracias, pero echo de menos su época de bebé, creo que han sido bebés muy poco tiempo y el dar casi por hecho que no tendré más hijos hace que se me ponga algo muy raro en el cuerpo.
Mis niños, mis tesoros, doy gracias de que se están criando sanos y felices, o eso espero al menos. Son la mayor luz de mi vida y no hay mayor orgullo para mí que tenerlos a ellos; han salido de mi, son mi fruto, los he gestado y parido, son el auténtico milagro de la vida, de mi vida.

4 thoughts on “Un poco de nostalgia

  1. adormir

    Ooohhhh….! Me ha encantado esta entrada!! De verdad!! Yo también sentí mucha nostalgia de mi embarazo y si lo pienso Y recuerdo me dan aun más ganas de repetir!!
    Me acuerdo que las primeras semanas lo pasé un pelín mal, me sentia muy pequeña para tantisima responsabilidad como lo es criar a un hijo. Pero reviviendo los momentos te das cuenta de cuanto te recompensa!!!!
    Un beso

    Responder

  2. Mo

    Otra que está nostálgica 😉
    Cada Navidad recuerdo las anteriors: embarazada, con mi bebito…Ahora ya pienso en Peque como un niño, y sí, ha pasado muy (demasiado) rápido.
    Besos!

    Responder

  3. Opiniones incorrectas

    Es lo mejor del blog cuando llevas mucho tiempo con él, que puedes revisar allí muchos momentos de tu vida 🙂

    Responder

  4. Carol

    Como dices son el milagro de la vida.
    Creo que es normal sentir nostalgia, yo también echo de menos a mi bebé, porque aunque la llamo mi bebé grande cada día lo es menos.
    A pesar de los mareos, las nauseas, lo ardores y algún dolor que otro para mi el embarazo fue maravilloso, y me gustaría volver a vivirlo. Quizás eso es lo que también echamos de menos.

    Un abrazo

    Responder

Deja una respuesta

Tu dirección de correo electrónico no será publicada. Los campos obligatorios están marcados con *

tres − 2 =

Este sitio usa Akismet para reducir el spam. Aprende cómo se procesan los datos de tus comentarios.