Llevamos poco más de un mes desde que iniciamos la introducción de alimentación complementaria con Antía y, la verdad, nos está yendo rodado porque come que da gusto, no le hace ascos a nada.
He de decir que lo estoy haciendo a mi manera, es decir, no estoy siguiendo ningún método, ni las recomendaciones del pediatra, no tengo la famosa hoja de recomendación que alimentación complementaria que aquí suelen dar en el control del niño sano de los 4 meses. Me estoy guiando por mi experiencia con Iván y mi sentido común, viendo la predisposición para comer de mi hija, cada niño es un mundo y creo que no se deben seguir unas pautas estrictas.
Empezamos unos días antes de cumplir los 6 meses con la introducción de los cereales. Como Antía no ha querido biberón de ninguna de las maneras decidí adelantarme un poco a los 6 meses para que comiera algo mientras yo estaba trabajando, y aproveché unos días de descanso en casa para probar la cuchara. La aceptó a la primera y los cereales le gustaron mucho, al igual que a su hermano (y a su Mamá de peque y no tan peque) le gusta la papilla espesita y desde ese primer día ha comido como si fuera lo más normal del mundo.
Con la fruta empezamos a principios de febrero más o menos, no recuerdo la fecha con exactitud. Probé a darle un Frutapura o Todofruta, no recuerdo muy bien cual era, y aunque la primera cucharada le supo extraña -lo deduje por la carita que puso- comió como unos dos dedos del total del vasito. Rehuso hacer papilla de fruta natural porque se desperdicia mucha fruta, ya que para hacerla variada hay que usar varias piezas de fruta y ni pretendo que mi hija se coma una cantidad de fruta que no me comería yo, ni mucho menos que se tire; no digo que sea lo mejor, simplemente es como creo que debo hacerlo.
Los dos primeros días solo comía eso, un par de dedos del vasito, a partir del tercer día pasó a comer el vasito completo y le debe encantar porque es ver que me acerco a ella con el vasito y volverse loca. De momento no está muy por la labor de masticar, no obstante mi idea es empezar pronto a ofrecerle fruta natural en pequeñas piezas, que sea fruta madurita y blandita, para que juegue y pruebe ella misma, aunque de momento no muestra interés por la masticación.
La verdura la hemos introducido esta semana, a los 6 meses y 3 semanas, y también ha ido genial. Preparé un puré de patata, zanahoria, puerro y calabaza y bueno, le encanta, se relame que da gusto y no me extraña, es una gozada cocinar calabaza para los niños porque es puro dulce. Iván no quiere los purés ni en pintura y estos días ha estado rebañando el plato de la hermana, supongo que también un poco por el culo veo-culo quiero, pero cuando lo pide insistentemente es que está rico rico.
Así que por el momento me puedo dar por satisfecha porque no se trata de que Antía coma todo lo que le ofrezco, sino de que solo con ver la cuchara abre la boca con mucha insistencia, le hace unas fiestas a la cuchara que da gusto verla, y eso es porque le gusta comer.
He leído últimamente en varios blogs sobre el
Baby Lead Weaning y he de decir que si bien me parece una buena opción para introducir la alimentación complementaria (prefiero hablar de “opciones” y no de “métodos”, la verdad), hay cosas en las que no estoy de acuerdo. Lo digo por uno de los argumentos que utilizan, que según estudios científicos este método protege del sobrepeso y desarrolla la preferencia por los alimentos sanos, dando a entender que la manera “tradicional” -empezar con purés- fomenta la obesidad y el gusto por la comida basura. Y yo creo que esto no se debe presuponer así pues la preferencia por una clase de alimentos u otros no depende solo de la manera de tomarlos; por lo menos debo decir que en nuestro caso de ninguna manera es así.
Iván probó la alimentación complementaria al estilo tradicional, con los purés. La papilla de cereales siempre le ha gustado, con las verduras y carne nos fue bien y la papilla de frutas ni la quiso; la fruta se la daba natural en pequeñas porciones, maduras y blandas, y siempre la ha comido con sus propias manos, primero en la red antiahogo. Conforme cumplió el año mostró curiosidad por probar de nuestro plato, porque SIEMPRE lo hemos sentado a la mesa con nosotros a pesar de que ya se hubiera comido su plato de puré, y cuando pedía le dábamos aquello que consideramos podía comer: patata guisada, arroz de paella, pescadito y cosas así, de tal manera que, a pesar de solo tener dos dientes, al poco de cumplir el año dejó de comer purés y pasó a comer lo mismo que nosotros solo que algo machacado. Yo cambié nuestros menús y los adapté para hacer una sola comida familiar que pudiéramos comer todos; siempre hemos comido juntos en la misma mesa, Iván es un niño que ha probado todo lo que le hemos ofrecido y a día de hoy, con 3 años y medio, es un niño muy buen comedor y delgado, esto último obviamente creo que es cuestión de genética.
Evidentemente no le dirá que no a un Donut, pero posiblemente antes prefiera un plátano o un bocadillo de jamón, no le gustan las chuches -en mi casa acumulo los paquetitos que le dan en los cumples porque no se los come- y ponga lo que le ponga por delante, sean garbanzos, lentejas, coliflor, guiso de carne, macarrones, se lo come y lo disfruta. Y es que, al margen de cómo aprendan a comer, depende mucho de nosotros, si en casa siempre hay bollería industrial y chucherías, si cada vez que va al parque o a pasear se le compran gusanitos y gomitas, evidentemente se le va a acostumbrar a que prefiera ese tipo de alimentos porque, no nos engañemos, son más golosos. A Iván le pierde el chocolate, y con todo lo que le gusta para él es un “premio”, sabe que es algo de lo que no se abusa, que se toma como postre y siempre por supuesto después de haber comido lo que corresponde.
Así que con Antía, viendo lo bien que ha aceptado la cuchara, y con la experiencia que he vivido con Iván, iremos adaptándonos según vayamos viendo, creo que como en todo nuestro sentido común debe primar a la hora de hacer las cosas, porque comer purés puede ser perfectamente compatible con sentarse a la mesa y probar nuevos alimentos con sus propias manos, y los padres somos los primeros responsables en inculcar a nuestros hijos una alimentación sana y equilibrada sin renunciar a algún caprichito de vez en cuando, que a todos nos gusta.
* Edito para incluir un par de cosilllas que se me habían olvidado.
Tengo que rectificar mis palabras porque esta tarde he tenido un imprevisto que me ha hecho hacer las cosas de manera diferente. Y es que cuando fui a la cocina a coger el Frutapura o Todofruta o como se llame no había ninguno, resulta que el último lo cogió Papá y no tuvo la previsión de decirme a tiempo que era el último que quedaba. Así que improvisé sobre la marcha, pelé una pera de agua, la machaqué con el tenedor, estaba muy tierna y jugosa, tanto que era más agua que pera; cogí un plátano, me comí medio y el otro medio lo eché en trocitos y lo seguí machacando, y le eché un par de galletas para espesarlo, pues la textura seguía siendo muy líquida. Al final eché mano de la batidora y lo trituré bien, me quedó un puré apañado y de una cantidad a mis ojos justa, a ojo podría equivaler al vasito del Frutapura, no era una gran cantidad. Pues allá que me fui a ver cómo lo aceptaría mi niña -Iván como digo jamás se ha comido un puré de frutas- y bueno, casi casi que rebañó el plato, fue un éxito. Así que puede que me anime a darle la fruta así cuando estemos en casa, pasándola cada vez menos para que poco a poco la vaya aceptando de manera natural y se acostumbre a la textura de la fruta en pedazos.
También tengo que decir que mi conclusión con todo esto de los métodos y las formas de hacer las cosas es que lo bueno es informarte, leer y quedarte con aquello que resuelve tus dudas o crees que es positivo y se adapta a tus necesidades. No creo que sea necesario seguir un método a rajatabla solo por que lo dice tal o cual , de la misma manera que si estás de acuerdo con las lineas generales pero crees que hay cosas que debes de hacer de otra manera, que así sea. Creo que hay que equivocarser por una misma, de los errores se aprende, y seguir tal o cual método-corriente o lo que sea no nos hace ni mejores ni peores madres que otras que no lo hacen, porque simplemente son diferentes formas de hacer las cosas y por encima de todo está siempre el bienestar de nuestros hijos, que es lo que realmente nos importa.
Hola! Precisamente esta mañana he estado grabando un vídeo sobre el baby led weaning! Yo lo practico con Carlitos, pero no creo que sea ni mejor ni peor que las papillas. Cada familia es diferente y cada niño es diferente. Tan bueno es lo uno como lo otro. En mi caso, Carlos no acepta la cuchara ni pa'trás, en cambio se ha comido media mandarina, un plato de macarrones (de arroz) y media tortita de arroz para comer, y con cuchara nanai!!
No creo que las papillas fomenten la obesidad, creo que esos estudios tienen "truco". Lo que creo es que los padres que "obligan" a los niños a comer, de una manera u otra, están criando a niños que no van a tener una buena relación con la comida. En cambio, cuando no los obligan y la comida es un placer, ya sea descubriéndola ellos mismos como con el BLW o dándosela sus padres de una manera respetuosa con cuchara, lo más seguro es que el día de mañana coman de todo. Todos conocemos a la típica persona que no come verduras porque "le cogió asco porque sus padres le obligaban de pequeña"
Claro, es que hay que partir de la base de que cada niño es de una manera, y no a todos les gustan lo mismo, los hay que son más delicados pero simplemente porque no les agradan ciertos sabores o texturas. Y no hay nada más desagradable que comer por obligación algo que no te gusta.
También está, como dice Carlos González, que una cosa es lo que necesitan comer los peques y otra lo que los papis pretendemos que coman, y ante eso intento entender que puede haber días que mi hijo devore un caballo y otros que no tenga apetito, igual que yo puedo tener días que no me apetece comer nada. La diferencia está en que yo puedo decidir no comer y a ellos los obligamos, y eso no debería ser. Yo desde luego cuando Iván dice que no quiero comer no le obligo porque se que es así, ya que normalmente no hace falta ni preguntarle porque manifiesta efusivamente sus ganas de comer.
yo creo y en mi opinion claro, que hay que hacer caso a los pediatras, y cuando te dicen lo de la alimentacion complementaria, sera xk hay que darsela. yo si lo hago, pero cada familia es un mundo
un beso
nuria
Yo creo, y también en mi opinión, que en temas de crianza no hay que hacer todo lo que digan los pediatras porque no es una ciencia exacta y ahí cada uno aporta su opinión o experiencia, ya que no estamos hablando de enfermedades ni padecimientos sino maneras de hacer las cosas. Por lo que se por amigas, compañeras y conocidas que tienen peques a la par que mis hijos, por lo menos aquí cada pediatra tiene su librillo, es decir, unos te recomiendan que introduzcas primero la verdura, otros que lo hagas con la fruta, otros que a los 4 mess, otros a los 5… en fin, que dependiendo del pediatra que tengas las cosas se hacen de una manera u otra, no hay un criterio unificado, con lo que es un poco según lo que el pediatra que te ha tocado disponga. Y como todo pueden estar acertados o pueden errar básicamente porque cada niño es de una manera y no todos están igual de maduros o predispuestos paraa aceptar los cambios.
Me encanta este post! Yo también llevo a cabo el baby led weaning con Abril (ahora tiene 10 meses)y está siendo todo un éxito. Desde que nació hemos ido siguiendo los métodos de Carlos González, tanto en la lactancia como ahora con la alimentación complementaria. La dejamos comer cuanto quiera y damos mucha importancia a la teta. Además, como sabemos que ella va a comer lo mismo que el resto de la familia, nos obligamos a comer sano. Ojalá siga comiendo así de bien…
A mí me gusta mucho leer e informarme de todo lo posible pero luego cojo lo que me parece que me puede ser útil o conveniente, sin seguir a pies juntillas lo que diga X o Y solo porque son X o Y. Creo que no hay que ser radical y que cogiendo de aquí y allá puedes aprender muchas cosas y sacar en positivo si crees que se adapta a tus necesidades. Con esto me refiero a que por ejemplo en lineas generales me gustan los planteamientos de Carlos González pero no sigo linealmente todo lo que dice, sino que cojo aquello que considero útil para mis hijos y para mí.
ale con el tema fruta hacemso igual, yo tambiwen compro fruta pura…a ella le gusta mas y no desperdicio la fruta, si le doy cachitos de platano y naranja cortados por mi pero cuando se cansa pues a la basura el cachito y yasta. en cuanto a la alimentacion la hojita que da el pediatra a saber donde estara, tenia claro que nolo haria con sus pautas, nerea empezo con el gluten a los 6 meses y medio con pequeños cachitos de pan y demas ahora que va ser ocho esta mas que establecido y con s6 meses queria todo muy liquido, yo le hacia sus verduras y se las batia muy aguadas ahora de buenas a primeras empezo a rechazarmelas pobre a darlas a cacho y eso es lo que queria! comer a cachitos y masticar asi que ella pone sus pautas solita sin obligaciones.
Pues como el otro día nos fue bien con el puré casero voy a intentar hacérselo así porque al final no tiramos nada. Usé una pera pequeña, medio plátano y un par de galletas, salió una cantidad normal, vamos, no era mucho. El gluten yo se lo metí directamente, tras leer mucho que en bebés de lactancia era mejor introducirlo antes…
Pues tienes mucha suerte que los dos te han salido buenos comedores, yo lo agradezco cada día, porque Maria es unn lima comiendo, le gusta todo por suerte, lo único que no consigo que coma a trocitos es la fruta, ningún tipo de fruta,no sé porqué, en cambio sí triturada.
pero vamos, que no nos podemos quejar ni la una ni la otra;)
Sím, se que es una suerte porque yo viví lo que es tener un niño mal comedor con mi hermano y es un auténtico calvario. Pero es que lo curioso es que Antía no es que coma bien, sino que se nota que le gusta comer, y eso es una delicia.
Si tu peque todavia no come pedacitos dale tiempo, no dejes de intentarlo porque lo mismo un día de estos te sorprende. Un besote.
Yo anoche empeze con chloe la papilla sin gluten con el biberon pero como no hay manera de que saliese… Alfinal con la cuchara ! Por que me pase de espeso pero ella encantada … No me esperaba que con 4 meses la gustaria tanto comer con cuchara …
Como dices no se trata de métodos sino de sentido común y de lo que nos funciona a nosotros y nuestros hijos.
Nosotros hemos hecho casi baby-led-weaning, digo casi porque si nos ponemos a hacer todo a rajatabla, pues no ha sido así. Desde el principio le hemos ofrecido trozos y siempre en la mesa junto a nosotros. Creo que cuando dicen que previene la obesidad se refieren a que con las papillas siempre comen más, sin embargo si se les deja que coman ellos solos suelen comer menos (uno de los motivos por los que algunas mamás terminan dándoles luego un poco de papilla). Tengo pendiente contar cómo nos fue a nosotros con la introducción de la alimentación complementaria.
Desde luego no estás teniendo ningún problema, parece que le gusta todo lo que le ofreces, qué bien.
Un abrazo
Me alegro mucho de que esta nueva etapa vaya muy bien. Nosotros Abril no quería la papilla de frutas ni en pintura así que empezó a tomar la fruta a trozos (y la verdura) casi desde el principio. A nosotros nos ha funcionado muy bien y la verdad que estoy contenta, como bien dices cada familia debe encontrar su método. Un besazo
La alimentación complementaria es un tema muy amplio, hay varias opiniones sobre cuándo, cómo y con qué alimentos hacerlo… Cada bebe es distinto por lo que no hay una formula para saber cuál es la mejor manera, hay que encontrarla en cada caso
http://www.bebeslectores.com
[…] impedimento para llevarlo a cabo. Y no es que yo sea una defensora de este método, de hecho yo no he practicado BLW como tal. Pero me gusta llamar a las cosas como son y no dejarme guiar por falsas creencias. El BLW […]