La retirada del pañal es una de esas etapas de la crianza que me daba un poco de miedito. Lo confieso. No me apetecía nada andar fregona en mano, limpiando pises por doquier, pero sobre todo, no me apetecía tener limpiar restos sólidos y verme obligada a tirar algún que otro calzonzillo o braguita por ser insalvable. Es lo que había leído antes de meternos en este fregado con Iván,...
-
Mi princesa se independiza: bye bye colecho full night
Que mi niña es una dormilona es un hecho irrefutable. Desde que nació es quedarse dormida y caer casi inconsciente,...