¿Qué hacer con los niños si no podemos ir de vacaciones en verano? es la pregunta que nos hacemos muchos padres ante la llegada del verano, cuando sabemos que no podremos salir de viaje o vacaciones con nuestros hijos y que tenemos que entretenerlos de alguna manera.

Se acerca el verano, tiempo en el que la gran mayoría de gente aprovecha para disfrutar de sus vacaciones, hacer viajes y escapadas, en pareja o en familia, conocer nuevos lugares y hacer aquello para lo que llevas esperando todo el año.

También hay un grupo de gente, familias, con la crisis me temo que cada vez más numeroso, que no se puede permitir ese lujo. No nos pongamos dramáticos, como suelo decir, ya vendrán tiempos mejores, y quedarse en la ciudad (o donde residimos) no debe ser sinónimo de hastío. Seguro que hay muchas actividades que nos pueden hacer pasar un buen verano.

Cuando te encuentras en esta situación, la pregunta que te ronda la cabeza es ¿qué hacer con los niños si no podemos ir de vacaciones en verano?.

Nosotros no somos familia de vacacioneo, por trabajo, por economía, nunca hemos podido hacer un viaje a lo grande o veranear fuera de casa, pero siempre hemos aprovechado el verano o las vacaciones para hacer una escapada a algún lugar cercano, o aprovechar la hospitalidad de la familia y buenos amigos durante unos días para salir de nuestra rutina habitual. Me conformo con poco, ya véis, y gracias a ello hemos disfrutado a tope.

Desde que somos papás, a excepción del viaje de novios (que no cuenta como vacaciones estivales), en estos siete años solo hemos vacacioneado en una ocasión, hace tres años, que pasamos una semana en un apartamento en el Algarve. Hace dos años nos escapamos a mi tierra para visitar a la familia, algo que hubiera querido repetir el verano pasado, que no pudo ser, y me temo que este verano tampoco.

Hay que tener en cuenta además que en siete años he dado a luz dos veces en pleno verano -y este año me toca final de embarazo en pleno estío-  así que esos dos años no los cuento.

Por eso estoy acostumbrada a tirar de imaginación para que mis niños no se aburran en la ciudad. Porque no poder viajar o ir de vacaciones no debe ser sinónimo de quedarse en casa viendo el verano pasar. Gracias a su temperatura, a los largos días, a que es frecuente que los papás y mamás cojamos vacaciones en esta época y podamos tener más tiempo con nuestros hijos, el verano nos brinda maravillosas oportunidades de disfrutar a tope sin salir de viaje.

Solo tenemos que buscar, interesarnos un poco por lo que tenemos cerca, informarnos de qué actividades se organizan y que no haya excusa alguna para el aburrimiento.

¿Qué podemos hacer con los niños quienes nos quedamos en casa durante las vacaciones estivales?

Pues ahí van mis sugerencias:

– Ir a la playa: para quienes la tengamos cerca, claro. Por la mañana, por la tarde o a echar el día. La playa ofrece entretenimiento completo, es sana, estimulante, los niños se lo pasan bomba, llegan a casa relajados cuasi muertos de cansancio y duermen que da gloria verlos. Bien preparados y protegidos para el sol, con agua y aperitivos para no dejarnos los cuartos en el chiringuito.

Nosotros tenemos 120 km de costa, un lujo, lo se. Como vivimos en el punto medio de la costa, al playa más lejana, al este o al oeste, nos queda como mucho a 50km, así que si a diario vamos a la más cercana, en fin de semana que disponemos de más tiempo vamos a playas diferentes para cambiar de entorno y paisaje, conocer las particularidades de cada una de ella y el pueblo donde se encuentran.

– Ir a la piscina: antiguamente era un lujo, raro es hoy el pueblo o ciudad que no tiene oferta de piscina pública. Si tienes urbanización con piscina tienes el 80% del verano solucionado. Si tienes amigos o familia con piscina y la suerte de que te inviten a ella, no desperdicies la oportunidad. Allí además los niños suelen hacer amiguitos o una pandilla con quien compartir juegos.

– Ir al cine: en verano raro es que no haya alguna película infantil en cartelera. Una tarde familiar en el cine es un excelente entretenimiento, además de que estamos a resguardo de las altas temperaturas. Podemos aprovechar el descuento del día del espectador (aquí por ejemplo ese día el cine cuesta 3,90€) para que no se nos vaya del presupuesto.

Muchos pueblos y ciudades organizan cine de verano al aire libre, una estupenda opción cuando el tiempo acompaña. En Huelva por ejemplo tenemos el Festival de cine bajo la luna organizado por Islantilla Cineforum donde también proyectan cortos de animación infantiles.

Aviso, ¡no es el cartel de este año! 🙂

– Ir a la biblioteca: es un lugar donde pueden disfrutar de la lectura sin límites y además estar al fresquito. En muchas bibliotecas se organizan cuentacuentos y talleres infantiles, son actividades ideales para entretener a los niños cuando no se puede estar en la calle con el calor y no los puedes poner “en remojo”.

– Actividades en la naturaleza: el verano es una epoca en la que se puede disfrutar a tope de la naturaleza. Aunque claro, depende del calor que haga donde vivas, por el sur durante el día habrá que buscar lugares con buena sombra si queremos disfrutar en lugar de sufrir. Hay parajes dignos de visitar en verano. Lagos, ríos, cascadas, bosques, puedes ver qué opciones te ofrece tu entorno y organizar excursiones o rutas de senderismo para conocerlos con tus peques.

En Huelva somos afortunado de tener un entorno como Marismas del Odiel o Doñana, parajes espectaculares que nos ofrecen naturaleza en estado puro.

Además, hay ayuntamientos, organismos y empresas privadas que organizan actividades relacionadas con la naturaleza, algunas gratuítas como para fomentar el turismo o dinamizar la zona, otras de pago pero que quizás valga la pena. Como por ejemplo rutas a caballo, rutas en barco por la costa, senderismo nocturno -es una actividad que por aquí está triunfando mucho, sobre todo las noches de lluvias de estrellas o fenómenos similares-, nordic walking, actividades de multiaventura, los trenes turísticos… ¡La oferta es muy amplia!.

– Hacer visitas-actividades culturales: en verano se suelen organizar actividades para animar la visita a lugares que puedan ser de interés turístico o cultural. Para ello deberás estar atento a la oferta de cultura y ocio del ayuntamiento propio o vecino, incluso de alguna localidad más alejada porque puede valer la pena, y ver qué es lo que os puede interesar y llamar la atención de los niños.

Exposiciones, ferias, visitar monumentos, el verano da lugar a que se realicen propuestas muy variadas e interesantes que, incluso sin ser especialmente para niños, pueden ser muy entretenidas.

– Asistir a obras de teatros, conciertos: si hay una época del año donde se celebran conciertos y obras de teatro fuera de la programación normal, es en verano.

Es una época que se aprovecha para organizar festivales de música, danza o teatro, donde las compañías y artistas giran por toda la geografía, dándonos la oportunidad de disfrutar de su espectáculo, y muchas de las compañías dedicadas a los niños aumentan sus actuaciones durante el verano para llegar a más sitios aprovechando, por ejemplo, las diferentes ferias y festividades de pueblos y ciudades.

– Ir al parque acuático. Es, de hecho, una de las propuestas de ocio que más se solicitan en un lugar de vacaciones con niños. Hoy en día rara es la provincia que no tenga un parque acuático, por lo que es una excelente idea si no podemos viajar, pasar el día en un parque acuático cercano.

Aquí ya interviene tener cierto presupuesto para ello, pues a veces las entradas no son baratas, pero también suele haber ofertas y descuentos que si estamos atentos podemos aprovecharlas para ahorranos algo en las entradas. Para los niños es una diversión asegurada, y para muchos padres también.

Este verano nos encantaría ir a Aquashow en Quarteira

En Huelva tenemos un Aquopolis y tanto en el cine como en supermercados, Burger King, McDonalds y otros establecimientos, reparten cupones de descuento. Y si no nos importa desplazarnos un poco más, en Sevilla o en el Algarve tenemos unos cuantos de parques acuáticos, cada cual más impresionante.

– Visitar el zoo o reservas de animales: ¿qué niño no adora a los animales?. Es un plan que nunca falla. Suelen estar más concurridos que el resto del año pero la ventaja del verano es que alguno de los padres esté de vacaciones, y que en esta época el horario de visita es más amplio. A veces tendremos que desplazarnos a una provincia vecina pero, si no está muy lejos, vale la pena el viaje para pasar un día entretenido en familia.

En Huelva tenemos cerca la Reserva Natural de El castillo de las Guardas, en la provincia de Sevilla (aunque está justo en el límite con al provincia de Huelva), que es una reserva donde los animales viven en semi-libertad.

Además tenemos Zoomarine, que aunque está en Guia (Albufeira), está relativamente cerca para poder ir y venir en el día. En ambos sitios hay ofertas comprado las entradas online o, en el Castillo de las Guardas, si los niños tienen en carnet del Club La Banda (Canal Sur) pagan solo el 50% de la entrada.

– Ir a parque de atracciones o temáticos: esto ya depende de que tengas la suerte de tener alguno en tu ciudad o relativamente cerca. Si vives en Madrid, Parque Warner, en la zona de Levante o Andalucía occidental, que es donde están ubicados estos parques, puedes planear visitar un día alguno de ellos (el que te quede cerca, obviamente), e incluso organizar una excursión de varias familias (familiares, amigos, compañeros de colegio) para disfrutar de la experiencia en grupo y así además ahorrar un dinerillo.

Aquí tenemos cerca Isla Mágica y hay una oferta especial los viernes a partir de las 17 horas que es muy asequible.

 Y es que está claro que siempre tendremos alguna actividad cerca para disfrutar del verano sin salir de casa, solo hay que intentar estar informado y al día, buscar un poquito y por supuesto, proponerse aprovechar el verano a tope aunque no podamos salir de vacaciones.

¿Qué te parecen mis propuestas?. ¿Crees que es posible pasar un buen verano sin viajar?. Venga, me encantará escuchar tus ideas.